Vieja estampa del pasado borroneada en la memoria Levanto aquí tu semblanza como bandera de gloria Para que seas en mi tierra divisa de una esperanza Mansero, humilde mansero, cuidador de las tropillas Trotaste por los carriles y allá en los pueblos y villas Recortaron tu silueta cien fogones y candiles Te vieron las albas duras, entre escarchas y neblinas Parar la tropa de mansa al diestro de la madrina Y preparar la mateada mientras los peones descansan Sigo tu senda mansero con mi tropilla de sueños Y en zambas y chacareras de fiel cuño santiagueño Voy mentando la guapeza de tu alma noble y señera La veo punteando la fila de la larga caravana Con la madrina de tiro, en el guión de la mañana Y el humo de su cigarro redobla blanco un suspiro Canta y eleva su pena por pampas, montes y breñas Mientras otea en la distancia de mil peligros las señas Para proteger las tropas confiadas a su constancia Gauchito de noble estirpe girón de tiempos lejanos Quisiera que seas el guía con tu saber de baqueano En estos tiempos trillados que cruza la patria mía Sigo tu senda mansero con mi tropilla de sueños Y en zambas y chacareras de fiel cuño santiagueño Voy mentando la guapeza de tu alma noble y señera