No hace falta besarte para probar tu boca Sientes como la fruta prohibida jugosa No hace abrazarte para sentir tu cuerpo Sé que es como la seda más pura, más tersa No hace falta que hables, para saber qué piensas No hace falta tocarte, para saber que quemas Esa forma que tienes de hablar con los ojos Siempre provocando, siempre provocando Tienes el misterio que a mí me enloquece Y aunque no lo digas no, sabes que me tienes Y te gusta verme así porque te divierte No hace falta un milagro, para que seas mía Solo que me conozca si tú lo decidas No hace falta que hables, para saber qué piensas No hace falta tocarte, para saber que quemas Esa forma que tienes de hablar con los ojos Siempre provocando, siempre provocando Tienes el misterio que a mí me enloquece Y aunque no lo digas no, sabes que me tienes Y te gusta verme así porque te divierte